Alba de Tormes fue escenario de dos mítines de PP y PSOE a muy poca distancia y con sólo media hora de diferencia. El secretario regional del PP, Alfonso FernándezMañueco, acusó al Gobierno del PSOE de “dilapidar” la mejor herencia de la democracia, acusó de haber dejado “a su suerte” a los agricultores y ganadores, mientras que respecto al AVE dijo que “ni está, ni se le espera”. Mañueco invitó a “cambiar el pesimismo socialista por la ilusión del PP para devolver la esperanza a miles de españoles”. En cuanto a las propuestas programáticas de los populares, explicó que la solución pasa por “ayudar a las familias y a los pequeños y medianos empresarios, mantener las desgravaciones por vivienda, reducir los impuestos y que las administraciones públicas se aprieten el cinturón”. El presidente provincial, Javier Iglesias, dijo que Zapatero tiene que abandonar La Moncloa “lo antes posible” y pidió “que nadie se quede en casa el 7-J”. Por su parte, Jesús Caldera destacó la importancia de tener una mayoría progresista en el
Parlamento Europeo, mientras que Fernando Pablos destacó la importancia de los fondos de cohesión logrados por el PSOE y aludió al papel de España en la inmigración en Europa, mientras que Ramón Hernández destacó las relaciones con los países limítrofres.